Quien soy
PABLO VALENZUELA
e: pv.valencia2@gmail.com • t: pregúntame • l: Valencia, España
Bienvenidos a este lugar donde tiene lugar la descripción de lo que he hecho estos últimos años. Citaré multitud de áreas y momentos que considero clave a lo largo de mi formación como persona y profesional. Esto no va a ser un currículum tradicional ni mucho menos. Empecemos…
Ah, si quieres saltar directamente a qué hago y cómo lo hago, por aquí hay un atajo.
Del 84 al 99
Nací en 1984 en Valencia. Hoy en día se podría decir que soy un joven empresario, pero a estas alturas del partido he dejado de considerar que encuadre en esa descripción.
Desde muy pequeño sólo he dedicado esfuerzo e interés por temas que verdaderamente han resultado atractivos para mí. La escuela nunca me produjo un desafío lo suficientemente interesante como para desarrollarme. Por esta razón pasaron los años de colegio e instituto sin una verdadera motivación por aprender más.
Algo que de pequeño siempre me ha traído de cabeza han sido «los ordenadores». Cuando el primer ordenador entró en mi casa yo no debía tener mas de 6 años, pero inmediatamente me llamó la atención el MS-DOS, los comandos y para qué negarlo, los juegos. Recuerdo aprender mucho en aquella época, mas centrada en mirar la pantalla de mi padre, lo que hacía y cómo lo hacía que en utilizar yo mismo aquel 286. Recuerdo aquella época y ahora mismo me encuentro en la misma habitación y en la misma esquina que se encontraba aquel PC redactando esto.
Pasaron los años y no recuerdo en qué momento en mi casa entró una revista con un CD que enseñaba a hacer, con el Microsoft Word, un listado de canciones en MP3. Esto resultó ser una forma de hacer, en local, una página web con enlaces a ficheros. El objetivo era copiar eso en un CD y que ejecutara al introducirlo en el PC. No lo sabía en aquel momento, pero eso era «hacer webs». De ahí descubrí el Microsoft FrontPage. Debía tener 14 años en aquel momento. Recuerdo bajar a la tienda que tenía bajo de casa «Pricoinsa», pagar 100 pesetas ¿por hora? y poder descargar cosas en un PC con internet. Luego me daban los disquettes con lo que había copiado y me iba a casa a montar lo que quería. Aquello sería mi primer contacto con internet y debía ser el año 98.
No tardó mucho en llegar internet a mi casa y fue toda una revolución para mi. Una de las primeras cosas que hice fue montar mi propia página web y probablemente su contenido sería de Dragon Ball (serie de la que soy fan). En aquel momento montaba páginas web sobre cualquier cosa, un mod del Quake, videojuegos… lo que fuera. Pero hacer las cosas en HTML era un autentico trabajo de chinos. Y un día comencé a preguntarme porqué en sitios web como Terra, algunas de sus páginas acababan con «?id=XXXX». La página era la misma, pero el contenido importante cambiaba. Sabía que algo había ahí que a mi me interesaba, pero internet no era lo que es hoy en día ni nadie a mi alrededor sabía nada de eso. Pero lo que sí sabía es que eso no era HTML normal.
Así que fui a la biblioteca de mi instituto y busqué libros de informática y programación. No sabía qué buscaba exactamente, pero conseguí libros de Visual Basic y comencé a aprender la terminología gracias a mi profesor de matemáticas, que también era el profesor de informática, Martín. Gracias a el entendí lo que era una variable, un bucle y los «if, else». Aquello me abrió los ojos. Lo siguiente que hice fue ir a una librería y encontré un libro de ASP con un CD. Lo leí y encontré lo que necesitaba: Trabajar con bases de datos. Así hice mi primera web, en el ’99, con bases de datos de Microsoft Access. La temática: cómo no, videojuegos de Dragon Ball.
Del 99 al 2002
Sería el año 2000 cuando saltó a la fama cierto programa de intercambio de archivos: eDonkey 2000. Justo ahí me encontraba yo, ávido de aprender, con 16 años y dedicando mas tiempo a estos menesteres que a sacar la secundaria. Desarrollé una página llamada Hispadonkey que resultó tener un gran éxito. Recibíamos, en su mejor momento, hasta 50.000 visitantes diarios y comenzaron a llover ofertas. Alojamiento gratuito a cambio de publicidad, banners publicitarios… Podría decirse que en aquel momento y con 16 años, empecé a entender cómo funcionaban algunas cosas.
Aprendí otros lenguajes y gestores de bases de datos, hoy en día muy famosos pero en aquel momento estaban en pañales. Tuve que abrir una cuenta bancaria para poder recibir pagos y comencé a adentrarme en el mundillo de los «negocios online».
Ser el administrador de una página web de enlaces, en aquel momento no estaba mal visto. Además, tenía sus ventajas; conocías a todos los administradores de páginas web similares. Conocías a las personas que en aquel momento hacían que internet creciera. De hecho, en aquel momento, internet era relativamente pequeño para nosotros.
Durante esos años recibía muchas ofertas de anunciantes para promocionar páginas web de temática adulta (los dialers) y alguna que otra tienda online que ya comenzaban a intentar arrancar en internet. Recibía compensación por todo eso y pertenecía a un sitio web que me daba alojamiento gratuito a cambio de un anuncio en la página principal. Ser de culo inquieto tiene sus ventajas, y es que aprendes mucho. En el verano del año 2000 decidí que yo mismo podía hacer ese trabajo. Tenía contactos, tenía los conocimientos técnicos y, qué demonios, tenía tiempo libre, era verano!
Me dispuse a hacer mi primera compra online, que sería un servidor dedicado en USA. No sabía cómo iba a configurarlo desde el inicio, pero no era algo que me preocupara. Lo compré, me lo dieron, alojé mi página y comencé a ofertarlo a otros webmasters a cambio de publicidad de lo que sería mi nueva empresa (ya ves tú, un canijo de 16 años con su «empresa»), una empresa de hosting gratuito que decidí llamar Alvensis. Aquel verano lo pasé en mi pueblo, «trabajando» en esto durante la mayor parte del día y a veces la noche.
Recuerdo que en el 2001 nos juntamos en uno de los primeros «SIMO» (si no recuerdo mal el nombre), en Madrid. Los administradores de las páginas mas conocidas relacionadas con el eDonkey (y es que todavía no había nacido el eMule). En una de las comidas podíamos estar las 7-10 personas que movíamos centenares de miles de visitantes diarios. Por delante nuestro sólo estaban Terra, MSN y poco mas. Los más avanzados de edad tenían entre 22-24 años. Fue algo interesante. Esa fue la única vez que nos reunimos para pasar el día juntos.
Había conocido muchos anunciantes en estos años y ahora tenía además los soportes (otras webs) para colocar publicidad. Así que, ¿porqué no crear una agencia de márketing online? En aquel momento todo era dicho y hecho. Desarrollé lo que sería un panel de control para mis anunciantes, les vendía paquetes de impresiones (popups, banners…) y comenzaban a mostrarse en las páginas web. En aquel momento sería finales de 2002 y principios de 2003.
Durante esta época los estudios pasaron a un segundo plano. Repetí curso en la ESO, hice un grado formativo medio de electrónica en el cual suspendí informática… Ocuparse de los negocios tiene un lado malo y es que no podía evitar dejar de lado los estudios. Para mi aquello era una pérdida de tiempo, no me interesaba y no veía el futuro que quería. Seguí en ello hasta que tuve poder de decisión.
Aquellos años en el grado formativo fueron divertidos, pero también inútiles. Si que es cierto que algunos de los conocimientos me han servido, pero fueron dos años. Y tengo que confesar que durante las prácticas de empresa que hicimos dediqué mas tiempo a mi propio emprendimiento que a lo que se trataban en realidad esas prácticas.
Dejar de estudiar fue una decisión fácil y rápida, pero para mis padres no fue tan fácil aceptarlo. Recuerdo que hubo un ambiente de decepción e incertidumbre durante un tiempo. Y es que asumir que tu hijo, con menos de 18 años no quiere seguir estudiando… Internet no era lo que es hoy en día ni tenía tan buena publicidad.
Mientras tanto acababa de cumplir 18 años y ya podía ser un profesional en toda regla.
2003 a 2004
Recuerdo como si fuera ayer ir al servicio de orientación para autónomos de mi ciudad junto con mi madre, en Valencia. ¿Qué sabía yo de empresas, negocios o autónomos? Entre cero y nada, al menos esa era la teoría. Tuvimos una conversación con una señora que insistía en el hecho de contratar internet y teléfono para poder declararlo como gastos, porque claro, ¡necesitaba gastos! Y también recuerdo como me enfrenté a ella diciéndole que para qué necesitaba un teléfono, que no tenía sentido pagar por una línea telefónica si no la iba a utilizar. En mi cabeza no cabía el contratar cosas que no necesitaba. Después de eso nos fuimos.
Gracias a una asesoría cercana a mi casa pude darme de alta como autónomo y cobrar tantas cuentas que tenía pendientes de cobrar por la imposibilidad de facturar. A los pocos meses mis padres me ofrecieron un piso que teníamos vacío para que pudiera disponer de un despacho. Así que el verano de 2004 se pasó haciendo crecer la agencia de márketing online (que por aquel entonces ya tenía nombre: esDIRECTO), comprando un PC para mi despacho, comprando maderas y patas para mi futura mesa en el leroy merlín, limpiando y pintando el piso completamente.
Ahí me ví en septiembre de 2004, en un piso de 100m2 y sólo una silla, una mesa, un PC y el router. Para gestionar todo lo que estaba montando. En aquel momento tenía tantos anunciantes con tanta demanda de publicidad que acabé con las existencias de mi propia red, las existencias de la agencia de publicidad Cyberclick y la agencia mas grande de españa en aquel momento, Adlink. De esta última no acabamos con sus existencias 😉
El negocio funcionaba muy bien, aunque la mayor parte de la red eran anunciantes con publicidad para adultos. Siempre intentaba tener otras cosas, pero lo que funcionaba en aquel momento era eso. Desarrollé varias páginas web de otras temáticas y comencé a trabajar con email márketing gracias a algunos socios que vendían a su vez la base de datos de emails que generábamos (nada de spam), todo muy limpio y porqué no decirlo, también lucrativo.
En 2004-2005 la legislación para el uso de los dialers 906 cambió y se acabó el negocio para mis anunciantes. Paralelamente para mi también y se fue reduciendo paulatinamente. Gracias a otras vías de negocio que había establecido como el email márketing nos permitieron seguir adelante de forma holgada. El verano de 2005 contraté a un amigo para trabajar conmigo, también a un vecino y luego a otro amigo. Nuestra principal vía de ingresos había desaparecido pero no recuerdo que aquello me preocupara especialmente.
2005 a 2006
Realizamos multitud de desarrollos y sufrí en carne propia el plagio y el robo de información. En el verano de 2005 eramos varias personas, todos unos críos en realidad, pero podíamos trabajar y desarrollar ideas a una velocidad endiablada. Desarrollamos muchas páginas web, pero una de ellas, una tuvo un éxito especial. El negocio consistía en vender un determinado producto y cada X veces que el producto se vendía, se sorteaba una televisión de plasma, una videoconsola o algo similar. El éxito nos vino de la noche a la mañana e hicimos decenas de miles de euros en pocos meses. Teníamos la red publicitaria como escaparate ideal.
Mi vecino, que desarrolló el sistema conmigo, abandonó la empresa tras poco mas de 30 días tras el lanzamiento. Se dio cuenta que podía replicar el mecanismo. Así lo hizo. Recuerdo aquello como un daño moral mas que económico. Tenía dos opciones, o intentaba demandarlo (cosa que me parecía algo extremadamente difícil de llevar a cabo) o lo ahogaba. Me pareció mucho mejor opción ahogar su negocio. Decidí de la noche a la mañana triplicar el negocio. Había preparado la página web para que en un plazo de pocas horas poder tener funcionando otra exactamente igual, así que eso hicimos. Registramos 3 dominios más, hicimos tres diseños nuevos y en poco mas de 48 horas teníamos 3 páginas más que iban a ser competencia.
De puertas para fuera en aquel momento en España habían 5 páginas con el mismo modelo de negocio, un 20% del pastel teórico para cada una de ellas, de puertas para dentro, eran dos empresas. Así pretendía ahogar a quien se había llevado consigo la idea y el desarrollo. Tras este movimiento y con la experiencia adquirida durante varios años con la publicidad online, no tardó mas de unos meses en cerrar.
Mientras hacíamos esto surgió un comentario en la oficina ¿porqué no montamos una tienda online y vendemos móviles? Teníamos el contacto de un proveedor de telefonía libre y yo siempre tenía tiempo para nuevas ideas. Así que eso hicimos. En aquel momento montamos un comercio electrónico y el 21 de Diciembre de 2005 a las 23:51 hicimos nuestra primera venta y no sería hasta Abril de 2006 cuando hicimos nuestra primera venta con tarjeta crédito online, cosa que nos costó mucho conseguir por el miedo y desconocimiento que existía entonces. Pero no vendíamos teléfonos. Contra todo pronóstico, veníamos videoconsolas y tarjetas de memoria. Así empezó. A finales de año de 2006 estábamos haciendo hasta 80 pedidos diarios.
Todas las vías de negocio era un éxito y teníamos la suerte que si alguna caía, otra subía. Sin necesidad y por capricho nos trasladamos a una oficina al centro de Valencia. Pudimos ver las mascletàs en primera fila. Ahí estábamos nosotros, tres chicos de 21 años en una oficina de 140 metros cuadrados. Llevábamos la empresa adelante de forma holgada, pero también teníamos nuestra sala de videojuegos, no faltaban las partidas en red a cualquier juego del momento y las fiestas nocturnas estaban a la orden del día. Mas de una vez me detuvo el portero en la puerta del edificio sin ánimo de dejarme pasar por dudar que verdaderamente fuera a trabajar allí (y vestía bien!). Debíamos parecer niños.
2007 a 2009
Siempre diré que en aquella época todo era mas fácil. Hacíamos webs que en unas semanas alcanzaban volúmenes de tráfico superiores a las 10.000 personas diarias. El algoritmo de Google era algo… algo que no existía para nosotros. La estrategia SEO era algo sencillo y rápido. A veces tenía ideas a medio día y al día siguiente por la mañana teníamos algo funcionando y en marcha. Al poco tiempo era una nueva vía de ingresos. Y así surgió uno de los negocios mas rentables.
Una tarde con uno de mis mejores amigos hablábamos sobre cómo encontraba el los restaurantes nuevos que quería probar. Utilizaba una web muy famosa en aquel momento, pero que era un auténtico quebradero de cabeza. Lenta, mal diseñada y Google no tenía ni idea de su contenido gracias a unos programadores que hicieron un trabajo horrible. Hablábamos de una web que estaba detrás de una empresa con decenas de personas que habían hecho… «eso». Tal cual hablamos le dije: «Yo puedo hacer una web mucho mejor que esa, mas rápida y que te sea fácil de navegar y buscar lo que quieras». Y cómo no, apareció el desafío: «pues hazlo, venga». Sería invierno de 2007. En pocas horas teníamos toda la información vital de los negocios, realizando la tarea de categorización, modificación de estructuras y diseño de una base de datos que permitiera una navegación óptima.
A lo que fue hecho simplemente por hobby hubo que ponerle nombre, así que registramos un dominio y ahí está a día de hoy. 10 años después tenemos una web que alcanzó un tráfico brutal en unos 15 días y se ha mantenido hasta el día de hoy. Lógicamente hemos ido añadiendo contenido y eliminando el antiguo, pero se podría decir que este sitio web ha llevado, de media, menos de 20 horas anuales de trabajo. Por supuesto a estas alturas ha sido superado por muchos sitios web. Pero ¿qué podríamos esperar con la burbuja startup que hubo entre 2010 y 2014?
2009 a 2011
En 2009 decidimos trasladarnos. Dejó de ser interesante mantener una oficina en el centro de Valencia y tenía el interés de comprobar si nuestro principal negocio, sería viable a pie de calle. Así que nos trasladamos a una planta baja donde íbamos a poder contar con mucho mas espacio para nosotros a la vez que ganábamos un escaparate real con comercio físico.
Los primeros años fueron muy productivos a pie de calle y el negocio iba viento en popa. Ya no era época de emprender constantemente y eso se notaba, se trataba mas de hacer madurar un negocio. Por desgracia, a pie de calle se notó duramente, a partir de 2010, la situación económica española.
Durante algunos meses organizábamos partidas de poker en la oficina por la noche junto a mis amigos mas cercanos. Aproveché esa temporada para aprender probabilidad y algo de psicología aplicada al juego. Recuerdo que me interesaba mas la teoría del juego y leer sobre ella que jugar. Además descubrí, intentando jugar a nivel profesional, que por muy claras que tuviera mis mecánicas y la de mis oponentes, mi personalidad y temperamento no era el adecuado para tomar las decisiones adecuadas en una partida larga. Ciertamente, las enseñanzas que puede darte una temporada en este nicho son muy útiles.
Tras aquella inmersión en estos juegos me dí cuenta que llevar a un nivel profesional algo así iba a llevar un esfuerzo demasiado grande y que no me merecía la pena. Intenté buscar alternativas que me fueran mas rentables y mas alineadas a mi personalidad. Fue en esta época cuando descubrí el Value Investing y comencé a devorar libros sobre la materia. Una actividad que se mantiene hasta el día de hoy.
Siempre me había resultado muy interesante el mercado de valores, pero todas las personas que conocía nunca decían «invertir en bolsa» sino «jugar a bolsa». Hoy, con mi librería llena sobre estas materias tengo otra visión. Tengo que decir que como muchos, mi contacto con la inversión no fue directamente con la inversión en valor, sino fue algo escabrosa. Recuerdo leer un libro enorme llamado Leones contra gacelas y también otro (del cual no recuerdo su nombre), con una narrativa muy interesante que finalmente trataba de la inversión en el mercado de divisas y si, pretendía venderte un curso de trading haciendo dibujos sobre gráficas. Como buen ignorante compré dos libros más de este último autor y finalmente, tras leerlos e investigar decidí tirarlos. Así evitamos que cualquier incauto los lea en un futuro y se lo crea.
Diré, intentando mantenerme al margen de toda polémica y juicio, que para mi, la «inversión» siguiendo gráficos y/o análisis técnico es algo en lo que he preferido no entrometerme.
Fue en el año 2011 cuando se podría decir que empezó mi formación en el mundo de la inversión de la mano de Benjamin Graham. Y sobre esto dedico algunos posts, pues es una de mis aficiones.
ANALISIS DE USABILIDAD, BASES DE DATOS, DESARROLLO Y DISEÑO WEB
Exigente y detallista desarrollador y analista web que toma responsabilidad sobre los proyectos que lleva a cabo. Acostumbrado a trabajar con rapidez y centrarse en buscar soluciones que mejoren la efectividad de los sitios web y del negocio principal. Especialista en la automatización de tareas, incrementando y haciendo más provechoso el tiempo disponible de las personas. Pro activo y eficaz, con un perfecto sentido de la urgencia. Capaz de comunicarse con un inglés fluido fruto de años de comercio internacional. Áreas de competencia principales:
Desarrollador PHP • Entorno web, HTML, Javascript y principales librerías • Analítica web – A/B Testing • Desarrollo y Analítica en eCommerce • SEO – Presencia en buscadores • Bases de Datos SQL y NoSQL • Gestión de equipos • Comercio nacional e internacional • Relación con clientes y proveedores